Pablo Salazar Cossio

PLANIFICACION URBANA: UTOPIA EN EL CAOS

A continuacion, resumo un articulo escrito por Dhruv Kohli.

Desde el momento de nuestro inicio como especies informadas y conscientes, nosotros como seres humanos 'civilizados' hemos evolucionado a través de una serie de coincidencias críticas guiadas con un motivo de sustento y curiosidad. Los humanos, como especie, están produciendo el mundo más sustancial impactos, que influyen en innumerables procesos naturales, que involucran a millones de otras especies coexistentes. Esto incluye todo, desde derrames de petróleo en el Golfo Pérsico hasta la deforestación de la selva amazónica.

Bjarke Ingels explicaba la importancia fundamental de la arquitectura para la sociedad, ahora más que nunca, y la inmensa responsabilidad que posee la profesión al diseñar literalmente un mañana mejor.

Patrick Geddes, propuso teorías coherentes que yuxtaponen los asentamientos humanos con la naturaleza, reconociendo la ecología humana. Geddes fue biólogo, sociólogo, geógrafo y urbanista pionero, y sus teorías reflejaron formas de vida holísticas, su surgimiento y desarrollo a través de la interacción entre organismos y el medio ambiente, que es un paradigma fundamental para comprender la evolución y el sustento colectivo.

Geddes afirma que “la planificación urbana no es una mera planificación del lugar, ni siquiera una planificación del trabajo. Para tener éxito, debe ser una planificación popular. Esto significa que su tarea es. . . para encontrar los lugares correctos para cada tipo de personas; lugares en los que realmente va a florecer.”En contradicción con la teoría, la mayoría de las ciudades en el 19 º siglo estaban bajo una enorme influencia de la industrialización, con intenciones capitalistas. Gobernado por la élite, la mayoría de la población era de clase trabajadora, ganando lo suficiente para sobrevivir. "La Gran Bretaña victoriana fue la primera sociedad moderna en experimentar a gran escala el proceso de industrialización y el establecimiento del capitalismo moderno".

En la urbanización industrializada, se dio más énfasis al desarrollo de la prosperidad económica que a la vida humana o cualquier otra forma de vida. Este enfoque se extendió como un incendio forestal en todo el mundo, incluidos Estados Unidos, Canadá y algunas partes de Europa, y dio forma al mundo industrializado de hoy. “Pero la industrialización fue medible no solo en términos de índices económicos nacionales. Fue una causa y una consecuencia de la urbanización ”. Esta interdependencia ha evolucionado desde la revolución industrial, lo que refleja sus repercusiones a través del crecimiento exponencial de la población, la productividad y el consumismo que resulta en un desperdicio inmanejable y la contaminación. Sin embargo, la historia dice lo contrario. La tecnología ha forjado guerras mundiales, armas nucleares y esclavitud industrial, reflejando distopía en lugar de las promesas de un paraíso.

Lewis Mumford fue un gran pensador y creyente en la tecnología, que tomó las ideologías de Geddes a la 20 ª siglo, unificando el objetivo de estudiar el modo de vida dentro de la moderna sociedad tecnológica. "A Mumford le preocupaba poner a los componentes de la vida urbana moderna sobre una base sostenible en relación con las nuevas tecnologías y técnicas". Era un moralista y un utópico crítico que reconocía ambos lados de la tecnología. "La preocupación de Mumford no es rechazar la tecnología, sino garantizar que el avance tecnológico avance de manera orgánica, fomentando una vida comunitaria en la que la personalidad humana pueda florecer". Creía en el potencial de la tecnología para mejorar el entorno construido y la mayor parte de su desarrollo anterior. los escritos lo defendieron. En tecnica y civilizacion, Mumford transmite tecnología y progreso humano a través de un punto de vista optimista.

La tecnología está evolucionando en los sistemas de producción, orden y control de aceleración máxima. Estamos en una era de dominación de megamáquinas que influye silenciosamente en la sociedad como nunca antes. En The City in History , Mumford ofrece dos visiones alternativas del futuro. Por un lado, el mundo es un entorno artificial que constituye formas enteramente creadas por el hombre. Es un ambiente inorgánico controlado con precisión. Por otro lado, el mundo es una comunidad orgánica fundada en la simbiosis de la naturaleza, la humanidad y la sociedad.

En siglos pasados, hemos implicado la urbanización industrial descuidando el daño ambiental irreversible que ha causado al planeta. ¿Pueden las esferas urbanas suprimir la decadencia ecológica, unificar todas las formas de vida y anclar el cambio en una dirección humana?